Restauración del Monumento al General Martínez Campos
Durante 2022, la Dirección General de Patrimonio Cultural del Ayuntamiento de Madrid, con la asesoría técnica del Instituto del Patrimonio Cultural de España (Ministerio de Cultura y Deporte), llevó a cabo la restauración del monumento al General Martínez Campos, ubicado en el Parque de El Retiro y declarado Bien de Interés Cultural en 2013.
Esta intervención se enmarcó en el 75 aniversario del fallecimiento en Madrid del escultor valenciano Mariano Benlliure, autor de la obra.
El monumento al capitán general Arsenio Martínez de Campos y Antón (Segovia, 1831 – Zarauz, 1900), promovido por el marqués de Cabriñana y financiado mediante suscripción pública, fue inaugurado el 28 de enero de 1907, en el lugar donde se hallaba el estanque llamado de los Cisnes; si bien la plaza que lo rodeaba sería remodelada y embellecida tras la Guerra Civil, sustituyendo la barandilla metálica y el ajardinamiento de su alrededor por una lámina de agua, sobre la que hoy se levanta el monumento.
El encargo a Benlliure se realizó mediante la convocatoria de un concurso público del que resultó ganador el escultor. La obra centra la atención en la figura en bronce del general, montado a caballo, y sobre un promontorio, sin nada que reste protagonismo a la escultura.
El pedestal, de planta rectangular y ligeramente escalonado, remata en un plinto en forma de peñasco donde un bajorrelieve en piedra de Novelda se extiende por dos de sus caras para representar un episodio de la batalla de Castillejos, en la que tomó parte Martínez Campos.
El estado de conservación de la escultura en bronce era adecuado, aunque la pátina se encontraba algo inestable y cubierta con una película de suciedad y de depósitos de restos vegetales y de los anidamientos de las aves. Además, sufría patologías propias de las obras metálicas expuestas a la climatología.
En cuanto al pedestal, su actual estado de conservación estaba igualmente relacionado con la ubicación del monumento y su exposición a los agentes ambientales, así como con las acciones derivadas de anteriores intervenciones.
La actuación en el monumento, dada la complejidad de su conservación, supuso el desarrollo de un estudio documental y analítico de la obra y un diagnóstico exhaustivo de su estado de conservación y patologías. En las tareas participaron conservadores-restauradores especializados en materiales pétreos y metálicos. Tras la intervención, se elaboró un plan de conservación preventiva que asegurará su adecuado mantenimiento y control.
Los trabajos han conllevado una inversión de 31.269 euros.