Francisco de Goya
Esta monumental cabeza de Francisco de Goya y Lucientes (Fuendetodos, 1746-Burdeos, 1828), obra del escultor Juan Cristóbal, nace de un boceto inicial realizado por el artista para la Exposición Internacional de Sevilla de 1931. Fue instalada en junio de 1933 entre las dos ermitas de San Antonio de la Florida, junto al río Manzanares, pero, muy deteriorada durante la guerra civil, se retiró a los almacenes del Ayuntamiento de la Villa. Con posterioridad, ya restaurada, se colocaría en 1967 en una ladera del parque del Oeste, junto al paseo de Rosales, reintegrándose en 1978 a la glorieta de San Antonio de la Florida; finalmente, sería sustituida en este lugar, en 1986, por una estatua sedente en bronce del pintor, obra de José Llaneces, por lo que la de Juan Cristóbal se trasladó a su actual emplazamiento del parque de San Isidro, donde permanece después de tan aparatoso periplo urbano, siempre ligado a los paisajes goyescos. El primer boceto aludido se expuso en 1972 en la sala Goya del Círculo de Bellas Artes de Madrid con motivo de una exposición del escultor, conservándose una maqueta de la cabeza, de 0,60 x 0,30 x 0,25 m, en Cadalso de los Vidrios, donde el artista se había establecido y donde fallecería en 1961.
Juan Cristóbal González Quesada, almeriense de Ohanes, se formó en Madrid en el taller de Mariano Benlliure, pero completaría su educación en el Museo de Reproducciones Artísticas; con una extensa producción y numerosa obra pública repartida en distintos lugares de España, hay que mencionar su extensa colaboración con el arquitecto Casto Fernández-Shaw en diversas obras, ya realizadas, como el gran elefante de la presa cordobesa del Salto de El Carpio, o tan sólo proyectadas.
Galería de imágenes
Datos de localización y contacto
- Dirección
- Pº Ermita del Santo, MADRID
- Madrid
- España
- Barrio / Distrito
- SAN ISIDRO / CARABANCHEL
Estatua
| Configuración pedestal | Pedestal prismático de granito de 1,25 x 1,67 x 1,64 m. formado por un gran bloque central y otros dos paralelos en los extremos anterior y posterior, dispuestos sobre un zócalo del mismo material ligeramente saliente, de dimensiones 0,25 x 1,87 x 1,84 m. El frente principal presenta una sencilla lápida de caliza en dos planos escalonados: el inferior, encajado en un marco ligeramente rehundido sobre la cara granítica, y el superior, algo sobresaliente, con un recuadro interior en relieve con las esquinas cortadas en sendos cuartos de círculo convexos; dentro, una inscripción en caracteres incisos y pintados en negro: GOYA / 1746-1828. Las caras laterales son lisas en tanto que la posterior presenta un gran recuadro interior rehundido que, según ciertos documentos, habría alojado una placa, hoy inexistente, con la inscripción: DESDE ESTE LUGAR / FRANCISCO DE GOYA / PINTÓ EN 1788 LA PRADERA DE SAN ISIDRO / INMORTALIZANDO ASÍ EL PAISAJE DE MADRID / Y EL AMBIENTE POPULAR DE SUS FIESTAS / LA EFIGIE DE ESTE MONUMENTO FUE ESCULPIDA / EN 1932 EL INSIGNE ESCULTOR / JUAN CRISTOBAL / 1898-1961 / EL AYUNTAMIENTO DE MADRID / EN SU XXV ANIVERSARIO. Materiales: Pétreo (granito y caliza). Dimensiones: 1,50 x 1,87 x 1,84 m. |
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| Entorno recinto propio | El conjunto, asentado sobre un lecho terroso se sitúa en un entorno configurado como una encrucijada entre el encuentro del acceso al parque y un secundario acceso, resueltos ambos en una leve pendiente en rampa y escalonada, a modo de rampa italiana, sobre pavimento de bloques prefabricados de cemento en tonos terrosos y bordillos de encintado de cemento. Es un excelente escenario mirador sobre románticas visuales hacia los fondos del Parque de San Isidro, los castizos perfiles de la Ermita del Santo y los nostálgicos bordes del cerramiento y la silueta del Cementerio de San Isidro.; además, este final y acertado emplazamiento de tan viajera estatua de Goya, retrotrae a la mirada del pintor sobre las praderas del Manzanares y el perfil histórico de las colinas de Madrid al otro lado del río, desde cuyos bordes, en el primer emplazamiento al pié de las Ermitas de San Antonio, se simbolizaba la otra mirada (opuesta) de Goya sobre las praderas donde ahora se encuentra la efigie esculpida por Juan Cristóbal. Ambas miradas, en definitiva, testimonios fundamentales del Madrid decimonónico. |
- GEA ORTIGAS, María Isabel: Diccionario enciclopédico de Madrid. Madrid: La Librería, 2002
- SALVADOR PRIETO, María del Socorro: La escultura monumental en Madrid. Calles, plazas y jardines públicos (1875-1936). Madrid: Universidad Complutense, 1990
- APARISI LAPORTA, Miguel: Las cabezas de Don Francisco de Goya. Madrid Histórico, nº 2, mar, 2006, 42-49
- ROLDÁN PASCUAL, Joaquín: Monumentos y lápidas de nueva creación. Silex, 0, 166-123
- JUBERIOS OCHOA, Mariano: San Antón de la Florida [La Tinaja]. Museo Municipal de Madrid, tomo V, 1979, 1661-1663
- FOTOGRAFÍAS: Papel, 26/10/1984, Fotografías de su emplazamiento original en el Paseo de la Florida, Artes Conde Duque catalogado A.V.,
- FOTOGRAFÍAS: Papel, 17/04/1986, Fotografías de los daños del pedetal, Artes Conde Duque catalogado A.V.,
Descripción formal
Cabeza de proporciones monumentales en piedra caliza que representa a Francisco de Goya y se apoya en un sencillo prisma de granito situado tras las dos parejas de columnas que marcan el acceso al parque de San Isidro por el paseo de la Ermita del Santo. El pintor se nos muestra con profusa melena, frente despejada, prominentes nariz y mentón y labios gruesos y fruncidos en un gesto adusto. Desde la plástica genuina de su autor, Juan Cristóbal, en la que se combinan influencias del mundo clásico, de su reinterpretación renacentista y de las corrientes más contemporáneas, la potente cabeza, mediante una talla decidida y rotunda, con agresivos tajos, parece surgir en bruto como extraída del sólido capaz de la cantera, tratando de expresar en puros volúmenes y masas el fuerte carácter del pintor.
Dimensiones
1,45 x 1,37 x 1,70 m.
Materiales
Pétreo (caliza rosa de Sepúlveda).
Propiedad
Municipal.