Patrimonio cultural y paisaje urbano

Para recordar el lugar en que vivió y murió Gregorio Marañón y Posadillo (Madrid, 1887-1960), el Ayuntamiento de Madrid instaló una lápida diseñada por el arquitecto municipal Manuel Herrero Palacios en la planta baja del edificio, que fue construido por el también arquitecto Luis Gutiérrez Soto entre 1940 y 1945, en la plaza que a partir de la colocación de la placa lleva el nombre del doctor.
El ilustre médico y escritor, discípulo de Santiago Ramón y Cajal, presidente del Ateneo, catedrático de Medicina y académico en cinco de las ocho Reales Academias, recibió este homenaje un año después de su muerte, en un acto celebrado el día 27 de marzo de 1961, al que asistieron el alcalde de Madrid, conde de Mayalde, el ministro del Ejército, teniente general Barroso, el embajador de Argentina, general d'Andrea, el presidente de la Diputación Provincial, marqués de la Valdavia, el hijo del homenajeado, Gregorio Marañón Moya, y otros familiares, amigos y público, entre el que destacaba la actriz Lola Membrives.
Como arquitecto municipal, Herrero Palacios fue autor de obras tan destacadas como la última urbanización del Paseo del Prado en los años cuarenta del pasado siglo, o los jardines del Descubrimiento y el Centro Cultural de la Villa en la plaza de Colón.