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Puente de Segovia. Panel informativo

Elemento conmemorativo, Lápida

El Ayuntamiento de Madrid decidió significar la existencia del Puente de Segovia con la colocación de una lápida en la que se explicase la trascendencia de esta infraestructura, el puente más antiguo de Madrid, encargo de Felipe II y obra del arquitecto de El Escorial, Juan de Herrera. El que en su momento fuera el único acceso a Madrid desde el oeste, con el paso del tiempo ha devenido en icono monumental e hito referencial del paisaje del Manzanares. Con el proyecto de Madrid-Río, la visibilidad y accesos peatonales al Puente han mejorado, y conserva todavía su función inicial de comunicación rodada entre la calle Segovia y el paseo de Extremadura.

Las obras del Puente comenzaron en 1582 y duraron dos años. Se realizó en su totalidad a base de sillares de granito muy marcados, a modo de almohadillado pétreo. Dispone de nueve ojos de arcos de medio punto, con el central de mayor diámetro y decreciendo la anchura del resto hacia los extremos. Lo más singular de su sobria estructura son los potentes tajamares, circulares o triangulares en planta, según su orientación respecto al curso del agua, así como las bolas de remate del pretil superior, características del estilo del arquitecto.

Como así se indica en la lápida, el Puente vino a sustituir a otro anterior del siglo XIV. Los trabajos de enterramiento de la M-30 sacaron a la luz restos de este primitivo puente situado poco más al norte del actual. Realizado con materiales de construcción más débiles que los actuales del Puente, debió derribarse, con toda probabilidad, en alguna crecida del Río, lo cual ayuda a explicar la solidez de la obra de Herrera que hoy apreciamos.

De todos los avatares históricos del Puente, el más destacable, tal vez, sea su voladura durante la Guerra Civil, con el fin de evitar la entrada en la capital de las tropas sublevadas. Tras la contienda, se aprovechó su reconstrucción para darle más anchura y aumentar así su capacidad de circulación. Se reformaron asimismo sus aledaños con la construcción de cuatro plataformas más bajas en sus extremos, ocupadas en la actualidad por sendas láminas de agua.

La colocación de está lápida forma parte del proceso de información y señalización de los monumentos y elementos más singulares que jalonan Madrid-Río. De este modo, el paseo y disfrute de los márgenes del Manzanares, que el soterramiento de las vías de la M-30 ha permitido, se enriquece a través de la lectura histórica y patrimonial de su entorno.

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Datos de localización y contacto

Puente de Segovia. Panel informativo
Dirección
Pº  Marqués de Monistrol,  7  MADRID 
Madrid
España
Barrio / Distrito
PUERTA DEL ÁNGEL / LATINA
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Descripción formal

La lápida sirve de información y llamada de atención acerca del Puente de Segovia, ubicado unos metros más abajo. Se ubica en el muro de cerramiento de una chimenea de ventilación de la Calle 30, y desde sus alrededores se puede observar una completa panorámica del Puente.

En su diseño se han seguido similares criterios a los empleados en las otras lápidas conmemorativas e informativas de Madrid-Río. Está realizada en acero inoxidable mate a partir de dos planchas solapadas y separadas 1,50 cm aproximadamente una de la otra. La más externa, de 0,5 cm de espesor, ocupa la mitad inferior y reproduce una panorámica de la ciudad del S. XVI en la que se aprecia el Alcázar y los edificios que conformaban la llamada Cornisa de Madrid, con el Manzanares y el Puente de Segovia en primer término. Al pie del dibujo se puede leer: FRAGMENTO DEL GRABADO DEL PUENTE DE SEGOVIA Y LA CORNISA DE MADRID REALIZADO POR JULIUS MÜLHEUSER (C. 1650). El dibujo y la leyenda están serigrafiados con tintas oscuras sobre el acero inoxidable. En su parte superior, la plancha se recorta siguiendo la silueta de los edificios del fondo del dibujo. La plancha del plano del fondo, por su parte, lleva unos párrafos incisos divididos en dos columnas. Ocupan así la mitad superior de la lápida. Bajo el título de PUENTE DE SEGOVIA (1584), el texto menciona el patrocinio del Puente por parte de Felipe II y la autoría del arquitecto e ingeniero Juan de Herrera. A continuación se mencionan los principales acontecimientos asociados al Puente a lo largo de su vida, entre los que cabe subrayar su destrucción durante la Guerra Civil y posterior reconstrucción y ampliación en 1943.

La separación entre las dos planchas produce un sutil y original efecto de relieve en el dibujo. Ambas se recercan por una pletina puesta de canto que hace las veces de marco de la lápida. El conjunto resultante de 200 x 120 cm se empotra en el aplacado de granito rugoso que reviste un respiradero de las vías enterradas de la Calle 30. Las dimensiones de la lápida están ajustadas al despiece horizontal del aplacado. Su límite superior coincide así con la cara inferior de la albardilla de remate del muro, mientras que su borde inferior lo hace con la única junta horizontal del revestimiento. La lápida ocupa el extremo derecho del frente del muro y, aunque de ese punto no se dispone de una inmediata y completa visión del Puente, la lápida si resulta muy perceptible al estar situada al borde del camino longitudinal del Salón de Pinos que vertebra Madrid-Río.

La inscripción incisa en la plancha de acero describe lo siguiente:

PUENTE DE SEGOVIA (1584)

EL PUENTE DE SEGOVIA FUE CONSTRUIDO EN EL REINADO DE FELIPE II, BAJO LA DIRECCIÓN DEL ARQUITECTO CÁNTABRO JUAN DE HERRERA, ARTÍFICE DEL MONASTERIO DE SAN LORENZO DE EL ESCORIAL. LAS OBRAS DE CONSTRUCCIÓN COMENZARON EN 1574 Y FINALIZARON EN 1584.

ESTA IMPORTANTE ESTRUCTURA SE EDIFICÓ PARA COMUNICAR LA CIUDAD DE MADRID CON LAS POBLACIONES DEL NORTE DE ESPAÑA, ENTRE ELLAS LA CIUDAD DE SEGOVIA, POR LO QUE DESDE SU ORIGEN, COBRÓ EL NOMBRE POR EL QUE LO CONOCEMOS HOY.

EN EL SIGLO XVI, ESTE PUENTE CONSTITUYÓ LA CABEZA DE LA PRINCIPAL VÍA DE ENTRADA Y SALIDA PARA EL COMERCIO DE LA CIUDAD DE MADRID.

DURANTE LA GUERRA CIVIL (1936-1939) EL PUENTE FUE DINAMITADO Y RECONSTRUIDO EN 1943. EN ESTAS OBRAS, EL TABLERO DEL PUENTE SE AMPLIÓ, PASANDO DE 8,65 METROS A 31 METROS DE ANCHO, POR LO QUE, DESDE ESE MOMENTO, SE HA DESTINADO AL TRÁFICO DE AUTOMÓVILES.

EL PUENTE DE GRANITO DISEÑADO POR JUAN DE HERRERA SUSTITUYÓ A OTRO MÁS ANTIGUO, DEL CUAL SE TIENEN NOTICIAS DESDE EL SIGLO XIV, QUE HABÍA SIDO DESTRUIDO EN SUCESIVAS CRECIDAS DEL RÍO MANZANARES, ORIGINALMENTE ESTABA CONSTRUIDO CON VERDUGADAS DE LADRILLO Y PIEDRA CALIZA, TOMADA CON ARGAMASA, SUS RESTOS QUEDARON ENTERRADOS, MÁS DE CINCO METROS POR DEBAJO DEL ACTUAL NIVEL DE LAS ORILLAS, POR LOS SEDIMENTOS DEL RÍO.

Propiedad

Municipal

Ficha en formato PDF

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