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Ría y lago de El Capricho

Fuente, Estanque, Lámina de agua

La ría, que en su tramo central se abre para crear un gran lago, es el principal elemento acuático presente en el parque de El Capricho de la Alameda de Osuna, declarado en 1934 Jardín Artístico, hoy Bien de Interés Cultural como Jardín Histórico. Fue realizada entre 1794 y 1799 durante la primera fase de ejecución del jardín, en tiempos de Doña María Josefa de la Soledad Alonso-Pimentel y Téllez Girón (1752-1834), condesa-duquesa de Benavente y duquesa de Osuna, quien entre 1784 y 1834 fue la principal promotora de El Capricho.
Se ubica en la zona norte de la posesión, discurriendo casi en paralelo a la cerca del recinto, y se abastece de varios de los manantiales y pozos con los que cuenta la finca, que sirven además para el abastecimiento del resto de fuentes y estanques. A lo largo de toda la historia de El Capricho, la ría ha sufrido múltiples intervenciones, motivadas por sus constantes pérdidas de agua. Por ello, a finales de siglo XX fue totalmente restaurada, respetando por completo sus características originales.

Galería de imágenes

Fuente, Estanque, Lámina de agua
VasosUn gran vaso excavado, de trazado sinuoso y perfil interior uniforme, realizado con muretes de ladrillo macizo de más de dos pies y aparejo español enfoscado, revocado y rematado, según las zonas, con borde de ladrillo a sardinel, piedra de pedernal, rocalla o revoco recubiertos a menudo por abundante vegetación. Desde su origen el fondo y las paredes presentan acabados distintos, debido posiblemente a las constantes pérdidas de agua, aunque en la actualidad buena parte de su trazado interior se encuentra bruñido y fratasado con cemento u hormigón. La ría tiene una longitud total de casi 450 metros, una profundidad media de un metro y una anchura variable entre los 4 y los 9, que se amplían hasta 20 ó 16 en cada extremo. En su tramo central se ensancha para dar lugar a un gran lago –de planta irregular y con una longitud máxima de 66 metros y una anchura de 56–, que está presidido por una isla donde se encuentra el monumento al III duque de Osuna.
Componentes arquitectónicosAsociadas directamente a la ría hay una serie de construcciones, como el puente con gruta, el puente de hierro y la Casa de las Cañas o embarcadero principal, que se sitúan en las cercanías del lago central, además de diversos embarcaderos y escaleras que se encuentran repartidos por todo el recorrido. En su extremo oriental se ubica el fortín o batería y en el occidental el Casino de Baile, al que se accede desde un embarcadero que comunica con una escalinata, en cuya planta inferior se encuentra el principal manantial que abastece la ría.
Componentes artísticosEn la isla principal del lago se erige el monumento al III duque de Osuna, que contiene una placa en recuerdo de este antepasado de los fundadores de El Capricho.
  • MORA PALAZÓN, Alfonso: Esculturas del Parque Juan Carlos I. Madrid: Artes Gráficas Municipales, 2003
  • ESTEBAN PENELAS, José Luis y ESTERAS MARTÍN, Emilio y SILBER BRODSKY, Myriam: Parque Juan Carlos I. Jardín de las Tres Culturas. Madrid: Fundación Caja Madrid, 2001
  • ESTEBAN PENELAS, Jose Luis y ESTERAS MARTÍN, Emilio: Parque Juan Carlos I. Proyecto y Obra 1990-1992. Madrid: Ayuntamiento de Madrid, 1993
Descripción formal

La ría, rodeada en su mayor parte de diversa vegetación, es el elemento pintoresco más importante y de mayor tamaño del jardín de la Alameda de Osuna. Situada en el extremo norte, junto a la tapia, recorre la finca de Este a Oeste y en su entorno se encuentran algunas de las construcciones más destacables de todo el recinto (fortín, puente de hierro, puente con gruta, Casa de las Cañas o embarcadero y Casino de Baile), además de los restos de una serie de obras desaparecidas (casa de la esteras y choza de los barcos) y elementos accesorios como escaleras y pequeños embarcaderos.
Tiene una longitud de casi medio kilómetro y hacia su mitad se ensancha formando un gran lago, de forma irregular, que alberga dos islas, en una de las cuales (la mayor) se encuentra el monumento al III Duque de Osuna. Su trazado serpenteante (casi no hay un tramo recto) responde a los criterios fundamentales del jardín paisajista, en contraposición con el canal que es un elemento propio del jardín clásico-barroco.
Evidentemente, la ría está pensada para ser disfrutada navegando (en barca, bote o falúa), lo que convierte su recorrido en un agradable y sorprendente descubrimiento del jardín, percibido así desde diversos puntos de vista. Sus variadas sinuosidades ofrecen, según avanza el paseo, un panorama en constante cambio, que convierte al espectador en un personaje plenamente integrado en un paisaje-escenario.

Propiedad

Municipal.

Ficha en formato PDF

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